Es innegable que cada día comemos más seguro... Microbiológicamente hablando.
¿Qué quiere decir esto? En el apartado tecnológico-alimentario, las industrias alimentarias ya no se la juegan en los métodos de conservación de sus productos, ya que errores en éstos podrían dar toxiinfecciones alimentarias, y ello a las destrucciones de dichas industrias por escándalos. Esto ha dado lugar a que se hayan generado métodos de conservación y adición de aditivos y otros ingredientes para conservar el alimento y aumentar su vida útil, y que así, exista la menor posibilidad posible de contagio microbiológico.
Esto solo tenemos que verlo, por ejemplo, en conservas de alimentos, las cuales están realizadas con un líquido (llamado "líquido de gobierno") compuesto de aditivos para mejorar su vida útil, o tratamientos térmicos en lácteos para que duren muchísimos meses en refrigeración. Incluso en lácteos pasteurizados, los cuales hace unas décadas no duraban más de 3-4 días, hoy día se ha aumentado la temperatura del tratamiento, llegando a conseguir una vida útil incluso de 1 semana o más.
Con la carne ocurre exactamente igual. Solo tenéis que iros a la sección de fiambres y ver sus ingredientes. Ahí entenderéis de qué os hablo.
La Organización Mundial de la Salud advirtió en 2015 que un consumo habitual de carne procesada estaba relacionada con la aparición de diversos cánceres. Dentro de este grupo denominado "carne procesada", podríamos referirnos a subproductos cárnicos provenientes de cerdos blancos (el cerdo ibérico siempre será mejor opción), como embutidos estilo chorizo, mortadela, o carnes picadas estilo hamburguesas. Aquí entran las "burger meat" o "burguer meat".
¿Qué son las "Burguer Meat"?
Según el Real Decreto 474/2004, las "burguer meat" son derivados cárnicos no sometidos a tratamiento, elaboradas con carne fresca picada y a la que se le adicionan cereales y hortalizas, además de aditivos como azúcares, fosfatos, sulfitos o especias.
¿Cuál es la diferencia con respecto a las "Hamburguesas"?
A las hamburguesas solo se le puede adicionar sal y especias.
Por tanto, como a las burguer meat se le puede adicionar ingredientes no deseables, estaremos hablando de un alimento más procesado, además de contener menor porcentaje de carne. He llegado a ver burguer meat con un 70% de carne.
En cuanto a las características sensoriales, podemos ver claramente que las burguer meat poseen un color mucho más blanquecino y pálido. Esto se debe al menor contenido en mioglobina (proteína de color rojizo que provoca el color característico de la carne). Aparte, notamos una textura más gomosa.
Sin embargo, se dan fraudes...
Ya hemos visto que las burguer meat son de peor calidad que las carnes picadas/hamburguesas, por lo que su precio debería ser menos elevado. Muchas veces no es así. Como siempre, la industria intentando crear marketing a costa de engañar al consumidor.
Y como siempre, hay que tener cuatro ojos con la legislación, ya que la OCU detectó altas dosis de aditivos y otros tipos de carne no legisladas en este tipo de hamburguesas.
En dicho estudio, se llegó a la conclusión de que existía una higiene alimentaria deficiente, además de una adición excesiva (por encima de la legislación) de sulfitos (un aditivo conservante el cual muchas personas sufren alergia a este compuesto) o mayor % de grasa de la que se legislaba.
De las 22 marcas que se estudiaron, solo 5 cumplían la legislación. Realmente penoso.